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jueves, 30 de enero de 2014

Ponencia Felipe Ortuno Marchante - 28/01/2014

“El hombre es paradójico y dialéctico: es lo que es y lo que aún no es”

Felipe Ortuno Marchante dicta una ponencia magistral sobre “el escándalo de la Encarnación” en la Real Academia de San Dionisio



Brillantísima intervención del padre fray Felipe Ortuno Marchante, religioso mercedario y Académico Correspondiente, este pasado martes en la sede de la Real Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras. Bajo el llamativo título ‘El escándalo de la Encarnación. Modelo de antropología’, Ortuno dictó una ponencia de veras magistral que satisfizo sobremanera a la nutridísima concurrencia que –a pesar de los desapacibles asomos de lluvia- abarrotaron el salón de actos de esta docta corporación cultural jerezana. La fecundidad intelectual del conferenciante exponiendo bellísimos conceptos teológicos y filosóficos mantuvo intacta la unánime atención del público. Un trabajo expositivo –analítico, reflexivo- que traspasa y trasvasa los habituales cánones de una ponencia al uso para solicitar –en clara urdimbre de su inédita calidad ensayística- la pronta publicación (en libro impreso) de tan edificante estudio. Presidieron la sesión el presidente de la Real Academia de San Dionisio Joaquín Ortiz, el vicepresidente de Artes Juan Salido y el tesorero Juan María Vaca. El Académico Correspondiente José Luis Zarzana Palma tuvo a su cargo la sentida e incluso presentida –en conjunción a la amistad que une de antiguo a presentador y conferenciante- palabras de introducción curricular de quien enseguida –minutos después del inicio de su disertación- se hizo –coloquialmente hablando- con el auditorio.
Elegimos, muy resumida y espigadamente, varios fragmentos de la muy aplaudida conferencia de Felipe Ortuno:

- “Mi querido hermano, distinguido e Ilustrísimo cuerpo humano: Quiero que sepas que eres un ser dotado de eminente dignidad; y no por lo que de ontológico tengas, sino porque todo en ti es eminentemente digno y nada hay de ti que sea desaprovechable, como dicen las falsas religiones ideológicas de la espiritualidad pura. La dignidad en la persona comienza llamándose cuerpo, porque sin él, evidentemente, no seríamos nada. Yo no soy nada…sin ti. (Cfr. Carlos Días, Manifiesto para los humildes, p.47 ss.). Estábamos acostumbrados a las viejas filosofías griegas, a ese dualismo que desechaba esto tan palpable que somos por ideas abstractas y abstrusas hasta derivar en perversas ideologías de todo tipo, epicúreos y platónicos siempre enfrentados. Nos habíamos olvidado de la importancia que la corporeidad ha tenido siempre, desde los comienzos de la misma revelación hebrea en que la antropología estaba literalmente en la carne-basar, porque en ella ya se daba la auténtica respiración, nefes de Dios, y ya soplaba en la materia visible el viento, ruah de la trascendencia(Cfr. Juan Luis Ruiz de la Peña, Antropología teológica fundamental, pp. 23-24)hasta ese último estadio en el que el mismo Verbo se hace carne, cuerpo y alma, inhumanatio, hombre entero, incarnatio hasta sufrir nuestras servidumbres fisiológicas.Porque la sólo apariencia “valentiniana” y “gnóstica”.

- “Al hablar de Encarnación decimos y expresamos la carnalidad histórica, humana, visible, palpable, dominable, corruptible… del hombre. Este es el tema central de la teología, la filosofía y la ciencia… Hoy en realidad toda síntesis parte del hombre en lo que de ser es y en lo que en su proyección expresa, es decir, en cuanto arte, técnica, política y culturalmente sea… Este ser que es el hombre referido al Dios histórico, que es Cristo para los creyentes, lleva en sí las grandes metas a las que el hombre aspira y lleva en sí, paradójicamente, los grandes interrogantes que definen la insatisfacción ontológica del mismo ser humano (Ej.: … “angustia existencial ante la muerte”= Getsemaní). El hombre es el gran problema, la gran incógnita, el mayor reto de todos los tiempos…“me he convertido en un gran problema para mí mismo”, decía San Agustín. Y en verdad que en esta época, quizá más que en ninguna otra, el hombre sigue constituyendo el desafío mayor para todas las disciplinas existentes: ¿qué significa para sí mismo, qué riqueza tiene en su ser, qué captamos de ese yo en el que vivimos y somos cada uno de nosotros?”.

- “Tendríamos que entroncar con la historia del pensamiento global, con todos los métodos de acercamiento antropológico…San Agustín, Pascal, Kierkegaard, Heidegger, Sartre, San Pablo… Del Teocentrismo (E. Media) al Cosmocentrismo, del Antropocentrismo actual, con el derivado de todos los humanismos, a la Metafísica y la Lógica…Del hombre que piensa sobre el mundo, al estudio de los objetos que le circundan, que con Ortega compondrían el ser y sus circunstancias, del hombre que se pierde en sí mismo al hombre que se encuentra fuera de si, porque “el hombre está lleno de realidades que lo proyectan más allá de sí mismo”(Pascal)…Este hombre que “por ser inacabado en sí mismo, está llamado a perfeccionarse, perfección que busca como última y única” (Sto. Tomás) “…el hombre es una especie de horizonte de tiempo y eternidad, apartándose de lo inferior (tiempo) y acercándose a lo superior (eternidad)” (Sto. Tomás)”.

- “El hombre es paradójico y dialéctico, es lo que es y lo que aún no es, se siente imperfecto e inacabado, con posibilidad de autorrealización plena y abierto a lo que no es… y ahí es donde se va haciendo y actualizando, en el tiempo de sus propios determinantes físicos, con su naturaleza potencial(Zubiri) auto-proyectándose hacia la plenitud de sí mismo”.

- “Al decir Encarnación nos estamos situando en el tiempo histórico, es decir, en la dimensión existencial de la posibilidad del hombre, allá donde el hombre proyecta su futuro en libertad, rompiendo el determinismo heredado de la naturaleza dada… Decir Encarnación en clave creyente es lo mismo que decir: Dios cuenta contigo en la posibilidad de recrear el ser y el sentido de cuanto existe, en lo que tiene de creación y de recreación posible”.

- “Ahora bien, sigue el misterio: el hombre es un ser menesteroso, finito, contingente, no puede evadirse, y de su menesterosidad sigue pendiente su realización y subsistencia”.

- “La encarnación no se resuelve en la explicación conceptual de un sistema hegeliano, que nos puede servir metodológicamente para entender la realidad histórica, como lo ha hecho el materialismo marxista, pero que no aporta la inteligencia de sentido que se necesita para aceptar que Dios sea realmente en su propia Encarnación la totalidad del Dios a quien buscamos y el sentido al que tendemos. He ahí la gran paradoja y el gran escándalo que supone para el pensamiento humano la aceptación de la Totalidad en la realidad contingente de la Encarnación. Escándalo para los idealismos filosóficos y escándalo para los idealismos religiosos de todos los tiempos. Quizá escándalo para los idealismos emergentes en el mismo seno de la teología cristiana cuando dejan entrever influencia maniqueas y dualistas nada compatibles con la fundamentación a la que nos estamos refiriendo”.

- “La Encarnación es la hierofanía personal de Dios. El que viene de Dios entra en la entraña de la historia, asume su vida y sus miserias. Puede redimirla desde dentro en clave de entrega. Encarnación significa presencia personal. Allá donde se rompe la transcendencia inasible y toma en su ser la humanidad concreta, con su palabra, en su forma humana plena. No hay juego ni apariencia, es verdad en todo lo que de verdad humana hay en él. La encarnación encierra un mensaje concerniente no sólo a Jesucristo, sino también a la naturaleza y al destino de cada hombre(Cfr. L. Boff, o.c. p. 193)”.

- “Dios no es una idea, como podía haber dicho Hegel; ni se expresa en la hondura supra-material del alma o del espíritu, como podrían decir los neoplatónicos y/o gnósticos, sino en un humano concreto: Jesús de Galilea. Jesús es hombre (=un humano) individual, histórico. Un ser que necesita de los otros para nacer. Tiene madre, es hijo de la promesa, se sitúa en la historia de Adán, es decir en el contexto general de la historia de la humanidad. Lleva en su suerte la suerte de todos los seres humanos. En la Encarnación se cruzan todos los caminos de lo humano. Es el “universo concreto”: Dios no se ha expresado en un libro perfecto de misterios eterno (Toráh del judaísmo, Corán islámico), ni en la totalidad general del proceso cósmico, sino en Jesús, su Hijo, compendio y sentido de todos los seres humanos”.


jueves, 23 de enero de 2014

Entrega reconocimiento Benefactores 2013 - 21/01/2014



La Real Academia de San Dionisio reconoce públicamente la colaboración de las entidades benefactoras Williams & Humbert, Fundación Dr. Pascual, Unicaja y Fundación Mapfre

El vicepresidente de Artes de esta Real Academia de San Dionisio, Juan Salido Freyre, dictó el discurso de ofrecimiento subrayando que “las Reales Academias no atraviesan en la actualidad por sus mejores momentos económicos”


La Real Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras reconoció de nuevo públicamente el pasado martes el apoyo recibido por los ‘Benefactores de la Academia 2013’ en la entrega del correspondiente título expedido al efecto y que en esta ocasión recogieron los representantes de las entidades Bodegas Williams & Humbert, Fundación Dr. Pascual, Unicaja y Fundación Mapfre. Presidieron la sesión el presidente titular de la Real Academia Joaquín Ortiz Tardío así como los Académicos de Número y miembros de la Junta de Gobierno Juan Salido Freyre –vicepresidente de Artes- y Andrés Luis Cañadas Machado –Secretario General-. Precisamente el discurso de ofrecimiento corrió a cargo del académico Juan Salido Freyre. “Las Instituciones Académicas, como la nuestra –argumentó Salido-, Corporaciones de Derecho Público, de naturaleza esencialmente cultural y cuyos fines principales son el fomento de todos los trabajos de investigación y difusión de toda clase de conocimientos en todas las ramas que su título comprende, es decir, las Ciencias, las Artes y las Letras, no pasan hoy por sus mejores momentos económicos. Las Organizaciones e Instituciones como la nuestra, empeñadas en la difusión, fomento e investigación de las materias que le son afines, y sobre todo, con la cualidad de que las mismas se realizan sin ánimo de lucro, se encuentran en estos momentos en unas circunstancias que, aunque conocidas de todos, no son por ello menos preocupantes en su futuro inmediato. Al menos, con las fórmulas presupuestarias que han venido siendo habituales a lo largo de los años”.

Para Juan Salido “nos encontramos, pues, en una situación compleja, con unos colaboradores tradicionales en el apoyo presupuestario convencional (…) Esta situación, ya de por si dificultosa de gestionar, conlleva por otra parte, retrasos temporales en la recepción de las subvenciones, lo que origina ciertos desfases de tesorería, que en estas Instituciones, carentes de recursos propios en su práctica totalidad, está planteando situaciones en algún caso extrema, que obligarán a tomar medidas radicales como serían derramar el presupuesto entre los Académicos o incluso, en algún caso extremo, a la paralización de la actividad Académica”.

Salido hizo acopio de ciertas salvedades puntualizando que “no es el caso, ciertamente, de nuestra Institución. En primer lugar porque en todo momento se ha realizado una gestión económica prudente y racional, e incluso me atrevería a decir con criterios economicistas que, en todo momento se ha evitado una gestión presupuestaria con déficits negativos ni endeudamientos perversos. Antes al contrario, ha existido una política de austeridad activa, es decir, un criterio de buen uso de los siempre modestos recursos con los que esta Real Academia ha contado. Pero esta realidad no nos impide valorar, a corto plazo, unos escenarios preocupantes. La pregunta, llegado este punto, sería: ¿Cómo podremos atender 33 actos culturales de nivel, con la participación de notables e insignes catedráticos, investigadores, artistas, etc., muchos de ellos residentes en diferentes puntos de nuestro país? ¿Desatendemos a estos participantes, que ni en un solo caso son retribuidos económicamente?”.

En este sentido Salido constató no pocas reflexiones: “El llamado Tercer Sector- el Primero sería el sector público y el Segundo el privado -, que aglutina a las denominadas entidades sin ánimo de lucro (ESAL) se estima que representa en nuestro país alrededor del 5,5% del PIB. Buena parte de estas entidades no lucrativas que se integran en el Tercer Sector actúan en el terreno de la solidaridad, la acción social y la cooperación al desarrollo, por lo que su trabajo es de gran trascendencia no sólo para los colectivos beneficiarios (países en desarrollo, discapacitados, inmigrantes, entre otros) sino para la sociedad en general. Cierto es, que los grandes capítulos de la actividad se vinculan a entidades orientadas a la acción social entendida como ayuda a los más desfavorecidos, pero también en el epígrafe de acción social se incluye el apartado cultural. Y este es el punto de encuentro con nuestra Academia, ya que en el Artículo 2º del Título I de los Estatutos se indica que: Esta Real Corporación fue fundada el día 9 de Octubre de 1.949 por un grupo de intelectuales jerezanos, animados por la cultura y que se inspiraban en el principio de la dignidad del hombre y demás valores trascendentes de la civilización cristiana, teniendo como finalidad principal fomentar todos los trabajos de investigación y difusión de toda clase de conocimientos en todas las ramas que su título comprende, fines definidos en su Artículo Tercero. Es esta propuesta fundacional la que ensambla a la perfección con la idea de cultura universal defendida por muchos Académicos a lo largo de los años y especialmente por nuestro Presidente de Honor, Excelentísimo Señor D. Francisco Fernández García Figueras, línea de pensamiento claramente enfrentada en su planteamiento intelectual a la mantenida entre otros grandes pensadores por Oswal Spengler quién en su ensayo La decadencia de Occidente publicado en la década de los años 20 del siglo pasado proclamó que la cultura Occidental se encontraba en su etapa final”.

La realidad actual – y así lo subrayó Salido en su discurso- es que la financiación del sector es insuficiente para atender el gran volumen de necesidades y proyectos sociales de estas instituciones: “Si la escasez de recursos financieros es algo habitual en la gestión empresarial, esto se acentúa en el sector de la solidaridad, algo que contrasta con la enorme cantidad de proyectos e instituciones surgidas en los últimos años para atender las necesidades sociales. Por otra parte, esa financiación se encuentra diluida entre un número muy relevante de organizaciones, que compiten intensamente entre sí con una tendencia a la concentración de fondos en las grandes ONG (…) A la vista de todo lo señalado, la financiación de las ESAL resulta ser una de las cuestiones claves en Tercer Sector español. La diversificación de fuentes públicas y privadas, el control adecuado de la tesorería, la minimización de los gastos de gestión así como el mayor recurso a donaciones privadas, en especial a través de convenios con empresas, parecen ser las soluciones”.

jueves, 16 de enero de 2014

Recepción Académica Correspondiente Silvia María Pérez González - 14/01/2014

“Andalucía ya era barroca antes de que existiera el Barroco”

Brillante acto de recepción como nueva Académica Correspondiente de la Real Academia de San Dionisio de la historiadora Silvia María Pérez González



Una ponencia muy amena, con pleno dominio de la materia tratada, aportando profusión de datos inéditos y que mantuvo atenta invariablemente a la nutrida concurrencia de principio a fin. Rotundo éxito de la historiadora portuense –afincada en Jerez- Silvia María Pérez González quien, al hilo de la conferencia dictada bajo el título genérico de ‘Andalucía entre los siglos XIII y XV: Origen, Arte y Religiosidad Popular’, protagonizó su solemne sesión de recepción como Académica Correspondiente de esta Real Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras. Inmejorable inicio, por ende, del segundo trimestre del curso académico 2013-2014. Presidieron la sesión el presidente titular de la Real Academia jerezana Joaquín Ortiz Tardío, el vicepresidente de Artes Juan Salido Freyre, el Secretario General Andrés Luis Cañadas Machado, además del Académico Correspondiente y Archivero Municipal Manuel Antonio Barea Rodríguez en su función de presentador de Silvia María Pérez González. Cabe constatar que este acto académico forma parte de las actividades organizadas por la Academia de San Dionisio en su aportación a la conmemoración del 750 aniversario de la incorporación de la ciudad a la Corona de Castilla.

La disertación de la profesora Pérez González dio a conocer al público asistente parte “del resultado de su labor investigadora en torno a la etapa comprendida entre ambos siglos con respecto a Andalucía y especialmente en lo que se refiere a la creación artística relacionada con la religiosidad popular”, especialidad de la que la nueva académica es una destacada estudiosa y una profunda conocedora pues no obstante ha obtenido la calificación de sobresaliente Cum Laude por unanimidad del Tribunal ante el que defendió su tesis ‘Iglesia y Sociedad en Sevilla en la Baja Edad Media’.

Durante su -bien medida en el tiempo y en el ritmo expositivo- intervención Silvia María Pérez abordó –apoyada en un trabajo PowerPoint- qué es Andalucía, su inclusión en los títulos regios, en el lenguaje literario (las Cántigas de Santa María. Cántigas 367 y 398), Andalucía dentro del reino castellano y su asentamiento en núcleos urbanos, la repoblación que se hizo con cristianos, protagonismo político en el reino castellano, residencia de los reyes castellanos, Andalucía con rasgos comunes a todo el Reino aunque también con rasgos propios (por ejemplo los rasgos militares muy marcados, la diversidad de procedencia, la formación de campesinos libres), la conformación de la personalidad: el mundo urbano, gran comercio internacional, las estructuras agrarias, las aristocracias urbanas, la primacía andaluza: el crecimiento demográfico y económico y la expansión exterior.

Tras un interesantísimo capítulo dedicado al arte, finalizó con el dedicado a la religiosidad popular –es decir: cómo el pueblo se relaciona con Dios- explicando pormenorizadamente los sínodos, los ciclos litúrgicos, el origen de la Semana Santa (“que comenzaba el Jueves Santo. Viernes Santo por la mañana, el Sermón de la Pasión. Los días grandes eran los siguientes a la Pascua de Resurrección”), el Corpus Christi – “era la gran fiesta cristiana”-, los domingos y fiestas de guardar: sínodos y concilios: normativas, la costumbre de la misa diaria, la práctica sacramental, el bautismo, la confirmación, la confesión y la comunión, las curas de almas, el matrimonio – “que se celebraba poco como sacramento, había que tener unos altos presupuestos económicos”-, las fiestas paganas que se incorporan (las fiestas de los locos o fiestas del obispillo, donde se invertían efímeramente los papeles: el obispo pasaba a ser mozo y los mozos obispos. Fueron después prohibidas por los excesos”), los dramas sacros, el carnaval, la fiesta del uno de mayo o del veinticuatro de mayo: San Juan Bautista, las fiestas de la vida y de la muerte, las celebraciones litúrgicas por los difuntos y las prácticas poco religiosas… En el despliegue de conclusiones Silvia María –explicando el sentir y el modo de proceder de los andaluces- apostilló una deducción de veras fundamentada: “Andalucía era ya barroca antes de que existiera el Barroco”.

Al término de la sesión, muy aplaudida, la conferenciante recibió de manos del presidente de la Real Academia de San Dionisio la medalla distintiva y el título correspondiente que la hacen acreedora de su nueva condición académica.